PAOLA & NICOLAS

Todas las bodas tienen momentos o elementos que las hacen especiales y únicas. Este matrimonio fue realmente especial y diferente comenzando por la forma en que me contactaron, así como por quien se encargo de todo el proceso.

 

Recuerdo el día de la boda de Natalia y Galo, ya casi todo listo, todos corriendo y de repente llego una pareja de jóvenes divinos al salón de la recepción y me dijeron nos vamos a casar y nos gustaría que nos ayudaras. Así sin presentarnos, sin ver mi trabajo más allá de lo que sus ojos podían contemplar del salón ya finalizado. Ellos creyeron a primera vista en nuestro trabajo, lo cual hizo que yo me enamorara de ellos.

Iniciamos el proceso y aunque en las reuniones estaba presente Paola, el que siempre me contestaba mails de seguimiento y atendía llamadas era Nicolás quien fue el seleccionado para organizar su boda. Esto pocas veces o casi nunca sucede.

En la recepción del brief me contaron todos los puntos que querían. Entre ellos: fiesta con dj, hora loca y demás, pero mientras los escuchaba no me quedaba claro ese último punto y ahondando con preguntas como me encanta en ese primer momento, llegamos a la conclusión que la verdad es que la fiesta no era lo más importante, de hecho, no les gusta tanto bailar. Por lo cual todo cambio a un almuerzo donde la mitad de la experiencia de la boda sería poder presenciar el amor mágico que se tenían del uno por el otro, por que si hay algo que tiene este matrimonio es amor.

Empezamos el trabajo con la invitación. Queríamos a partir de este primer acercamiento comunicar lo que se quería vivir en su celebración: un momento familiar para compartir su amor, y fue así como llegamos a que la invitación sería un frasquito de miel, un alimento natural, para compartir en la mesa.

La locación fue El Pórtico. El salón que nos gustaba era muy grande para el número de invitados y ahí empezamos con los retos; ¿cómo hacer que se viera más pequeño? ¿cómo cubrir un espacio casi que de forma natural para que no se viera tan intrusivo? La gama de color seleccionada: azules, verdes y terracota.

 El día de la boda fue perfecto, un sol suave y una brisa sutil acompañaban el lugar. Nicolás lucia un vestido que hacia honor a la gama seleccionada: azul claro y lo complementaba el forro de la chaqueta diseñado por él. Paola una novia sencilla quien con la felicidad que trasmitía hacia que se viera muchísimo más linda.


NICOYPAO(94).jpg
NICOYPAO(229).jpg
 
NICOYPAO(98).jpg
NICOYPAO(207).jpg
 

La ceremonia estuvo cargada de palabras bonitas, entre ellas las de los papás que hicieron conmover a todos los invitados. A la salida los esperaban sus perros quienes fueron los primeros en lanzarse para iniciar con esta gran celebración.

NICOYPAO(238).jpg
 
NICOYPAO(253).jpg
 
NICOYPAO(322).jpg

En el salón, la naturaleza era la protagonista. Un telón de fondo con instalaciones botánicas suspendidas con telas e impresiones botánicas, fueron los encargados de aislar la parte que debíamos cubrir. Muchas matas, unas alquiladas, otras compradas y otras sembradas en nuestro taller, complementaron el espacio para lograr cumplir el deseo de Paola y Nicolás para honrar su amor por la naturaleza

 
 
NICOYPAO(159).jpg

Los postres, algo por lo que se derriten los dos, en especial Paola, los colocamos como en una estantería en medio de plantas, decorados sutilmente por Eclat Pastelería con plantas que le facilitamos para que todo fuera en línea.

 
 
NICOYPAO(160).jpg
 
 
NICOYPAO(454).jpg

Las mesas eran la mezcla perfecta entre el encanto de la sencillez, la sutileza de la naturaleza con las hojas y flores de los arreglos y la cálida luz de sol cayendo por todos los ángulos sobre ellas, haciendo del espacio el lugar perfecto para estar en familia como lo podría ser el patio de la casa de los abuelos compartiendo de un delicioso almuerzo.


Un grupo de jazz inicio acompañando la celebración y continuó una lista que Paola y Nicolás habían creado para el momento.

 

Iniciaron las sorpresas con ayuda de un telón que pusimos, donde se proyecto un video hecho por todos los amigos que no pudieron asistir, un momento lleno de risas y un par de lagrimas. La mamá de Nicolás creó un juego para así dar la noticia del lugar donde sería la luna de miel pues esta sería otra de las sorpresas del momento.

 

No hubo fiesta, no hubo hora loca y no hizo falta pues el sentimiento que fluía en todo el ambiente era suficiente para hacer de esta celebración un momento perfecto.

 
NICOYPAO(152).jpg
NICOYPAO(151).jpg
 
NICOYPAO(132).jpg
NICOYPAO(163).jpg
NICOYPAO(173).jpg
NICOYPAO(200).jpg
 
NICOYPAO(513).jpg

LOCACIÓN: El Portico

COORDINACIÓN, LOGÍSTICA Y DECORACIÓN: MANUAL DE ANTONIETA

FOTOGRAFÍA: doris alvarez

Fernanda nova